Laura, ¿Qué importancia tiene la alimentación en un proceso de fertilidad?

Las frases que suelo usar en consulta son “somos lo que comemos” y “ el alimento es tu gasolina”, por lo cual, una buena alimentación lo que va a conseguir es que estés mejor, más activa, más saludable, mejor nutrida, en un peso saludable y en un estado más adecuado a nivel fisiológico para que el cuerpo funcione mejor.

La alimentación, no va a conseguir un embarazo, pero si que puede ayudar a que los síntomas de la medicación sean menores, reducir el nivel de estrés y que tu cuerpo pueda estar mejor preparado para soportar los cambios de la medicación.

¿Se podría decir que hay alimentos que fomentan o bloquean la fertilidad?

No hay alimentos que bloqueen o fomenten la fertilidad, hay unas pautas alimentarias que de forma individualizada puedan ayudar a que el cuerpo este más receptivo y en unas condiciones optimas para ser madre.

En este punto, si que podemos decir que en caso de Hipotiroidismos, Síndrome de ovario poliquitos, amenorreas, reglas dolorosas, endometriosis existen pautas concretas para poder mejorar estas patologías, lo que no quiere decir que se consiga un embarazo pero puede ayudar a mejorar los síntomas.

¿Qué tipo de alimentación aconsejarías en un proceso de Reproducción Asistida?

Alimentación mediterránea con productos de calidad y con comida real, evitar procesados y aumentar siempre el consumo de vegetales y frutas, pescados azules…

Y por supuesto beber agua y actividad física.

Escuchar al cuerpo es fundamental y sobre todo no hacer locuras y dietas raras sin sentido, lo único que podemos conseguir es estresar todavía más al cuerpo y tener carencias.

Cada etapa de un tratamiento es diferente a otra ¿Es conveniente dirigir nuestra alimentación dependiendo del momento en el que estemos?

En este punto podemos enfocar la alimentación más al campo emocional y a la inflamación que supone la medicación.

Si que sería recomendable en momentos de más ansiedad y estrés ayudarnos con alimentos como la fruta que es dulce o elaborando bizcochos con harinas integrales , dátiles y plátanos o usar cacao de más del 80%, antes de elegir alimentos procesados que es lo que en momentos de ansiedad solemos necesitar.

También aumentar el consumo de frutas y vegetales con color que son ricos en antioxidantes.

¿Con cuánto tiempo podemos poner nuestro organismo a punto para acercarnos a un estado saludable?

Mi respuesta es desde ya, no hay que esperar para cuidarse.

Cuándo nos hablan de “comenzar una dieta” la mayoría entornamos los ojos con cansancio… ¿Qué nos recomendarías para emprender este camino con éxito?

Odio la palabra “dieta”, en las consultas no pongo dietas al menos en mi caso.

Cambiamos hábitos, cogemos rutinas, aprendemos a comer y a organizar nuestros menús para que este camino que empezamos sea a largo plazo.

No hay que tener prisa, no estamos en un sprint, este cambio es para siempre.

La idea es pensar en la salud de cada uno, la actual y a largo plazo y por ello no hay que usar la frase “estoy a dieta” sino empiezo a cuidarme y hacer cambios.

Y creo que con esta idea, sin prisa con cambios paulatinos, aprendiendo a cuidarte y a comer sano es como podemos empezar.

¿Qué importancia tiene la alimentación en nuestro estado anímico?

Muchísima, hay grupos de alimentos que favorecen que tengamos un estado anímico mucho más equilibrado. La alimentación es básica para que nuestro cerebro puede libera endofirmas que generan satisfacción y lo mismo con el deporte.

En estados de depresión y ansiedad se esta viendo que están muy relacionados con el tipo de alimentación que llevamos, y por ello a lo que debemos dar prioridad es a cocinar comida de verdad, de la que se compra en el mercado, en la frutería, pescadedría, panadería y carnicería. Sin etiquetas.

(Reviejo Nutrición imparte talleres en los cuales hablamos de este tema durante dos horas. El próximo será el día 22 de Noviembre)

Laura, hubo un momento que nos conmovió a todos los que te seguimos y fue aquel día en el que decidiste compartir en tu Instagram que estabas en un proceso de fertilidad ¿Qué te empujó a hacerlo y cuál ha sido tu experiencia con tus seguidores?

Llevamos 3 años con tratamientos de FIV. 3 FIV con 5 implantaciones y un embarazo de 2 meses que no llego a su fin.

He pasado por todos los estados anímicos y corporales y sé lo duro que es esto.

Me animé a contarlo después del aborto, debido a que compartir mi experiencia con otras mujeres me liberaba y me hacia sentir normal, ya que un aborto es algo que se esconde y que creo que no debe ser así.

Contarlo me hizo sentir libre para poder expresar lo duro que es esto.

La respuesta fue estupenda, de apoyo y de comprensión pero sobre todo el saber que hay más parejas que pasan por lo mismo.  Sin duda ompartirlo, me ha ayudado.